los cuernos y las torres asomando al fondo
Hace muchos años leí un libro que describía los mejores y más bonitos trekkings del mundo, Everest, Vancouver...y entre ellos estaba el de las Torres del Paine. Desde entonces, hace ya 20 años, lo tenía en la lista de pendientes y aunque estuve en 2009 sólo fue un pequeño aperitivo comparado con lo visto esta vez.
Nos plantamos allí y sin dudarlo salimos a hacer la O, o lo que es lo mismo, la vuelta completa al parque. Las espectaculares vistas de Las Torres, el Valle Francés, los Cuernos, los lagos y bosques y en particular el lago Dickson y el campo de hielo me dejaron maravillado. Pero aún quedaba por ver lo mejor, tras el paso John Garner se abrió un paisaje increíble, la vista del campo de hielo sur y de la lengua del glaciar Grey bajo mis pies es de lo más espectacular que he visto. Kilómetros y kilómetros de hielos hasta donde alcanza la vista y nadie alrededor. El descenso del paso John Garner es uno de los más peligrosos que he visto, una bajada llena de escalones y bastante empinada que, debido a que tienes el glaciar siempre delante, resulta difícil quitar de él la vista y mirar a los escalones para no perder los dientes jejeje. Un magnífico espectáculo que sirve de colofón a una gran experiencia, casi 3 meses de aventuras.
Guanaco
Los 2 últimos días en el Paine hicimos migas con 3 vascos y 2 ingleses y a la vuelta a Puerto Natales, lugar de salida y llegada a el Paine, quedamos para cenar todos juntos. Camino del restaurante nos encontramos con Jerry, que estaba en una agencia gestionando su regreso a Nueva York.
Dentro de la pequeña oficina nos dimos un abrazo como si de un viejo amigo que no veía desde hace años se tratara. Tras unas risas y una larga charla nos despedimos recordándonos la visita que ambos acordamos hacernos y seguimos cada uno nuestro camino. Jerry tenía planeado recorrer durante dos días las Torres del Paine para luego continuar hasta Usuahia, pero desde El Chaltén el viento no "negocia con terroristas" y se muestra implacable con el ciclista así que va a disfrutar más de las Torres y luego se vuelve a casa. Bien lo sé, recuerdo el 2009 y lo duro que fue luchar contra el viento, que te enfría y te desgasta como sólo él sabe.
La cena con los compis del Paine fue muy interesante y didáctica, diferentes opiniones, oficios y maneras de entender la vida siempre deparan nuevas ideas y sobre todo el aprendizaje a costa, claro está, de las experiencias de los demás.
cordillera paine desde Dickson
Después de tantos paisaje contemplados, tantos km recorridos, haber pasado frío, calor (poquito), lluvia o nieve, me quedo con las experiencias vividas y los amigos que he conocido.
cuernos desde el puente del campamento italiano
Escribo éstas últimas líneas desde el aeropuerto de Buenos Aires, mientras espero a que llegue la hora de embarcar hacia casa y quería agradecer sinceramente todos los que nos han seguido por este blog, a todos los que nos han ayudado y animado a seguir con sus conentarios en el blog, o por correo electrónico o por el "guasap" porque aunque no lo crean animaban a seguir viviendo aventuras "rumbo al sur". Espero que hayan podido vivir de alguna manera este viaje a través de mis relatos y que no les haya sido demasiado tostón el rollo este del pesao que se va de vacaciones y encima da tanto la lata.
Ya rondan en la cabeza nuevos y diversos proyectos, alguno que sospechó que va a hacer menguar la lista de pendientes que mencione antes, pero no será a través de este blog ya que una cosa es segura, el próximo no tendrá rumbo sur.
Muchas gracias.
el paso John Garner
campo de hielo desde el Paso John Garner
gracias hermano, por llevarnos de viaje a parajes y paraisos en los que nunca estaremos, ya sea por responsabilidades, por razones de salud, o porque en el fondo no nos atrevemos. gracias por ayudarnos a conocer sitios recónditos de este planeta que exploramos pocos aunque parezca que todo está visto y pateado. gracias por llenar tu mochila con todos nosotros y compartir tu viaje al fin del mundo sin que notes el peso que eso supone. y gracias por nuevas aventuras que, seguro, nos harás vivir en un futuro no muy lejano en las que esperamos formar parte de tu equipaje. te esperamos
ResponderEliminarGracias Jorge.
ResponderEliminarNo hace falta decirte que me has animado a seguir tus pasos. Ahora me toca a mí.... Cruzo los dedos!!!
Un Abrazo,
César.
Pedazo de viaje, enhorabuena chicos. Ya nos lo contaréis con una botella de vino por medio. Un abrazo.
ResponderEliminarDavid
Gracias, hermano, por llevar a toda tu familia en tu equipaje, incluso a los que físicamente ya no están. Gracias pir acercarnos a esos remotos lugares a los que, casi con toda seguridad, nunca llegaremos. Gracias por las preciosas fotos. Y, sobre todo, gracias por volver sanos y salvos junto a nosotros.
ResponderEliminarTu familia, que te quiere.